Cromado por piezas separadas de brazos limpiaparabrisas.

Cromado por piezas separadas de brazos limpiaparabrisas.

Brico nº 145

Este brico es más estético que funcional, pero puede que muchos aspectos de los que aquí explico le puedan servir a quien se encuentre en una situación parecida.

En la pasada edición de la feria de vehículo clásico Auto Retro de Barcelona, me fijé en el detalle que los coches clásicos, sus brazos limpiaparabrisas no eran pintados de negro, si no que estaban cromados, todos estaban impolutos, sin la más mínima marca del paso del tiempo. 

Me puse a pensar el por qué, y al revisar los de mi VW T-3, que están pintados de negro,  con 28 años y 7 vueltas al mundo recorridas, observé en ellos pequeños impactos de piedrecillas, que si bien no todos habían hecho saltar la pintura, muchos la habían dejado marcada, además de los insectos estampados que cuestan de limpiar.

Como tenía un juego de brazos limpiaparabrisas sacados de una furgo en desguace, los llevé al taller de cromados que ya conozco de otros trabajos que los hace de calidad con tres capas.

Me dijo que de cromarlos tal como estaban montados, poco tiempo durarían en buen estado al ser metales diferentes, zamak- acero, ya que ambos metales tienen técnicas diferentes en su anodizado y de cromarlos juntos, uno de los dos metales no quedaría bien, sobre todo el zamak que hay que tratarlo previamente con ácidos en caliente para que no le salgan burbujas.

Quedé en entregarlos con sus piezas sueltas para poder aplicar a cada metal su tratamiento específico.

Foto nº 01

Para desarmar los brazos, lo primero fue desmontar los muelles, éstos al estar en reposo se juntan sus espiras, por lo que de llevarlos a cromar así, el cromado no penetraría entre espiras ni al interior, y seguro se oxidarían por entre sus espiras.  Era necesario construir un utillaje que los mantuviera estirados.

Tomé unos trozos de varilla roscada doblados en forma de “C” con muescas en sus extremos donde se alojaran los ganchos de los muelles y  quedaría solucionado este primer problema.

Detalle de cómo estirar un muelle con seguridad para instalarlo donde sea necesario.

Foto nº 02

Una vez sacados los muelles, había que desmontar los remaches que hacen de eje, rebajando su cabeza con un disco abrasivo de dremel hasta poderlos sacar, éstos ya no servirían a la hora del montaje, pero tuve la suerte de que eran exactamente de ø5,00 mm., y pensé en montar  tornillos inox de M-5.

Foto nº 03

Las piezas de Zmak tienen dos agujeros que se tienen que proteger para que no sean cromados, la parte cónica estriada donde se fija en el eje del vehículo, y el agujero por donde pasa el remache que hace de eje de unión con el brazo de acero, éste lleva por su interior un casquillo de bronce, si el baño de cromo entrase por allí, se reduciría su diámetro haciendo imposible instalar el tornillo de M-5.

Taponé esos cuatro agujeros con tornillo y tuerca, ello es suficiente para evitar que entren los baños electrolíticos.

Foto nº 04

Uno de los puntos débiles de las piezas cromadas son los cantos vivos, lugares por donde con el paso del tiempo se pueden empezar a  desprender y oxidar, así que repasé todos los cantos vivos y rebabas, primero con lima y después con rodillo de lija con dremel, sobre todo el alerón que presentaba filos casi cortantes.

Foto nº 05

Tras tener todas las piezas preparadas los llevé al taller de cromados, me hizo presupuesto de 50,00€ , tras un mes de espera me los dejaron así de brillantes.

Foto nº 06

Los muelles, como era de esperar, totalmente cromados y pulidos.

Foto nº 07

Y las piezas de Zamak , desmontando los tornillos que protegían las zonas para que no entrara el cromado, quedaron intactas.

Foto nº 08

Me faltaban los remaches para unir las piezas de zamak con los brazos de acero, tomé unos tornillos allen inox de M-5 x 50 mm de largo, que era el largo que tenía una parte de 26 mm sin roscar, necesitaba un mínimo de 21,5 mm. sin rosca para que hiciera de eje de unión entre ambas piezas.

Rebajé sus cabezas allen hasta dejarlas en forma de lenteja, pasando por ellas el disco textil de pulimentado hasta dejarlas brillantes como los brazos cromados.

Foto nº 09

Corté estos tornillos a 21,5 mm.  que es el largo necesario para remacharlos, pero para poderlos remachar, le hice en su extremo un taladro bien centrado de ø3,75 mm.  y 4 mm de profundidad, dejándolo como un tubo que permitirá abrir sus paredes para aumentar su diámetro, con ello se mantendrán firmemente remachados a los brazos de acero.

Foto nº 10

Antes de introducir estos tornillos que a la vez de hacer de remaches, harán de eje basculante entre las piezas de zamak y los brazos de acero, engrasé bien con grasa de teflón tanto el eje como el agujero de bronce de la pieza de zamak por donde se introduce.

Foto nº 11

Momento de remachar los tornillos modificados, con un punzón afilado de forma cónica y unos golpes de martillo, se abre el extremo aumentando su diámetro exterior y quedando remachado se evita que se escape.

Foto nº 12

Detalle del tornillo remachado y el punzón afilado en forma cónica, tras abrirse el tubo, es necesario un par de golpes de martillo para dejarlo plano.

Foto nº 13

Y llegó el momento de ensamblar los muelles, utilizando como utillaje un aro de alambre como en la foto nº 02 por seguridad.

Foto nº 14

Foto nº 15

El alerón solo va instalado en el brazo del lado del conductor, lo instalé con remaches de pistola al igual que estaba, pero con remaches inox de ø3 mm.

Foto nº 16

A la hora del montaje en la furgo, recordé la avería tan común que han tenido muchos, que el estriado de unión entre la pieza de zamak y el estriado del eje oscilante del vehículo suelen coronarse, para evitarlo, limpié bien con cepillo de púas metálicas ambos estriados, más un posterior limpiado de dichos estriados con disolvente, para instalar entre ambos antes de unirlos, pasta fijaroscas, que garantice una fuerte unión.

Foto nº 17

Tras apretar la tuerca del eje con fuerza, hay que colocar el tapón negro, que no solo hace de embellecedor, si no que evita que quede el agua allí encharcada creando óxido, dichos tapones los he instalado con pasta selladora para evitar la corrosión.

Foto nº 18

Ambos brazos ya montados, los veo algo extraños, pero ya me iré acostumbrando.

Foto nº 19

Nunca había llevado este alerón, teóricamente por la fuerza del viento en contra debe de apretar más la goma contra el cristal, pero supongo que esto debe de notarse por encima de los 100 Km/h.

Foto nº 20

También he instalado en los brazos mi brico para alejar las gomas del cristal, este aro que se apoya en el tope de silicona:

Brico nº 18: Prolongar la vida útil de las gomas de los limpiaparabrisas 2º con artilugio metálico

Foto nº 21

Foto nº 22

Ya puestos en dejarlo todo nuevo, aunque las gomas de las raquetas Valeo todavía estaban en estado aceptable, decidí ponerlas nuevas y cambiar de marca, para no olvidar su referencia me la guardo aquí, monté  unas Bosch AR19U 475mm./19” ref. 3 397 008 533-KEA

Desde su instalación, ya me ha llovido unas cuantas veces y los he utilizado en las 3 velocidades sin el más mínimo fallo, con los años comprobaré la eficacia de lo que he hecho.

Terminando con mi habitual frase, colorín colorado, este brico se ha acabado.